La Americana Ford siempre nos trae noticias alentadoras. Siempre piensa en la seguridad de los pilotos y ocupantes de sus carros. Hace un par de meses atrás nos sorprendió con la noticia de que sus modelos equiparían cinturones de seguridad inflables. Un par de meses después nos llegó un informe que nos explicaba como los carros de Ford decidirán cuándo es mejor contestar el teléfono celular. Pues bien, ahora, nos llega otra noticia más sorprendente: Ford idea asientos que detectan problemas cardíacos.

El Centro de Investigación e Ingeniería Avanzada de Ford, previendo una sociedad con mayor expectativa de vida, trabaja en una serie de herramientas que contemplan las conductas y necesidades al volante de los adultos mayores.

Uno de los proyectos es la implementación de butacas capaces de detectar problemas cardiovasculares. En caso que esto ocurra, el sistema emite una alerta temprana que permite al conductor detener la marcha del carro y solicitar asistencia médica. El asiento prototipo incorpora seis sensores de tecnología electrocardiográfica (ECG) los cuales son capaces de detectar irregularidades orgánicas incluso a través de la ropa del usuario, funcionalidad de la cual no gozan los equipos ECG tradicionales. Por supuesto, resulta útil para conductores de cualquier edad.

Ford informa que además trabajan en la ampliación de esta innovación mediante la sincronización con el sistema SYNC desarrollado por la firma. De este modo, si el sistema ECG detectase una señal irregular, el teléfono móvil envía en forma automática un mensaje de alerta a un servicio médico, además de un reporte detallado con los datos recabados.

El trabajo de los ingenieros de Ford también contempla la utilización de un dispositivo de realidad virtual que funciona en conjunto con el denominado “traje de la tercera edad”. La herramienta simula las dificultades que enfrentan algunos conductores mayores, como la rigidez de las articulaciones, la disminución de ciertos sentidos, la reducción de la potencia en las manos y la merma tanto auditiva como visual. El objetivo: interpretar y comprender las necesidades de los conductores maduros a fin de desarrollar soluciones.