En el Auto Show de Ginebra 2017 también hay espacio para los autos eléctricos, uno de ellos es el  Renault Zoe e-Sport Concept y otro bastante interesante y exótico es el Toyota  i-TRIL, un pequeño  prototipo eléctrico de cuatro ruedas y configuración de asientos con una plaza delante y dos detrás (1+2) con capacidad de conducción autónoma, el cual está destinado a ciudades pequeñas y medianas, con algunas formas y líneas más que llamativas. Este Concept define lo que será la movilidad urbana en 2030.

Este es el Toyota i-TRIL Concept:

Si, el i-TRIL es bastante extraño, y eso se nota con solo darle un rápido vistazo. Es una especie de moto de cuatro ruedas, con algún posible parecido con el Renault Twizy por la forma de su habitáculo. También, por su condición de vehículo de tres plazas, con una butaca central y un gran espacio detrás donde pueden sentarse dos pasajeros.

Una de las características de su diseño es el desprendimiento del habitáculo y el eje trasero, lo que posibilita que las ruedas posteriores se mantengan firmes perpendiculares al piso, y sólo sea el habitáculo el que se desplace levemente al tomar las curvas.

Para maximizar su espacio de entrada tiene puertas que se abren en forma de alas de gaviota (denominadas por Toyota como alas de mariposa). Además, el asiento delantero se puede girar hasta 20º.

El interior se destaca por la ausencia de pedales: todos los controles de aceleración, freno y dirección se operan a través de unos comandos similares a los de un videojuego donde normalmente se encontraría el volante, que tampoco existe en el i-TRIL. Además, la base del asiento cuenta con un cojín central que ofrece un ajuste cómodo y de gran apoyo para las piernas del ocupante. Los dos pasajeros de la parte trasera también cuentan con un gran espacio para las piernas y mayor visibilidad, ya que el reposacabezas del asiento delantero se fija al techo del vehículo y se desplaza hacia abajo cuando el vehículo está encendido.

La Toyota asegura que el i-TRIL tendrá unas 120 millas de duración entre cargas, con la capacidad de la conducción autónoma.

Con un peso no muy superior a los 600 kilos, el pequeño Toyota i-TRIL mide 2,8 metros de largo y 1,4 metros de alto. El vehículo tiene una configuración de cuatro ruedas que no mantienen la distancia entre vías: las de delante tienen 1,2 metros de separación, mientras que las traseras están bastante más juntas: 0,6 metros.

  • Imágenes del Toyota i-TRIL Concept.